abril 03, 2014

Acreedor ¡léase nuestra Constitución!

De la misma manera como hay convenios internacionales que ayudan a inversionistas extranjeros cobrar lo que debidamente les deben los gobiernos, debería haber convenios que ayuden a los ciudadanos a no tener que cargar con el pago de deudas contraídas por gobiernos que incumplen con sus constituciones.
Si en los estatutos de una empresa apareciese que ésta no debe endeudarse más allá del 50% de su patrimonio, pero su presidente solicita endeudarla un 100%... creo que sería difícil conseguir un bufete de renombre que emitiese una opinión legal que indique que no habrá ningún problema.
Y si las constituciones son los estatutos con los cuales los ciudadanos se defienden de los excesos de sus gobiernos; y si los acreedores cuentan con que los ciudadanos han de sacrificarse honrando las deudas que sus gobiernos han contraído... creo que los ciudadanos deberían poder esperar de sus potenciales acreedores, que por lo menos le echen una ojeada a sus constituciones, a ver si se cumplen.
Y no importa que estos acreedores sean de Wall Street, San Cristóbal o Conchinchina.
Y no es que espere que los acreedores estén en conocimiento de todo en la Constitución, como por ejemplo si se cumple con lo relativo a los derechos de los pueblos indígenas, pero, como un mínimo minimorum, unos sofisticados financistas deberían conocer a fondo, en detalle, si se está cumpliendo o no con un Artículo 320 que establece:
"El Estado debe promover y defender la estabilidad económica, evitar la vulnerabilidad de la economía y velar por la estabilidad monetaria y de precios, para asegurar el bienestar social. El ministerio responsable de las finanzas y el Banco Central de Venezuela contribuirán a la armonización de la política fiscal con la política monetaria, facilitando el logro de los objetivos macroeconómicos. En el ejercicio de sus funciones, el Banco Central de Venezuela no estará subordinado a directivas del Poder Ejecutivo y no podrá convalidar o financiar políticas fiscales deficitarias".
¿Entonces? ¿Puede alguien que conoce de finanzas, sostener que nuestra Constitución se ha cumplido? ¡Claro que no! Y por lo cual, como ciudadano, les informo a nuestros acreedores que no me vengan mañana con un lloriqueo buscando mi apoyo para que se les pague.
Todos los ciudadanos del mundo enredados por malos gobiernos, deberían asumir esta misma actitud... solidariamente.
Y no es que esté lanzando mis advertencias después del hecho... como cualquier maula. En "Deuda odiosa", Marzo 2004, y en "Crédito odioso", Abril 2004, le rogaba a los acreedores colaborar con los ciudadanos... ¡y nada! Y cual sal en la herida les hemos pagado altísimos intereses. ¿Pues saben qué? Comiencen por aplicarle al principal adeudado esas altas primas de riesgo... para así por lo menos confirmarles lo del riesgo.
¿Y qué culpa tengo de que no me hayan leído? ¡Que me sigan por Twitter!
Habiendo sido recientemente burlados por la OEA, esa casa club de gobiernos donde ni siquiera se leen las constituciones, queda claro que necesitamos la OCA, la Organización de Ciudadanos Americanos.
PS. Hay muchas encuestas por ahí, pero a mí la que más me gustaría ver, es aquella que interroga a los participantes del golpe del 4F-92, sobre si esto es con lo que ellos soñaron. 
PS. Se busca un dictador democrático que, arrancándole nuestras resultas petroleras al Estado y entregándoselas a los ciudadanos, quiera ubicarse en la historia como quien logró la verdadera independencia de Venezuela.