Tenemos un país harto y cansado de agravios políticos por lo cual lo último que de verdad quiere oír es de un candidato de oposición…
El solo hecho de buscarse un "candidato de reconciliación" para el 2012 les movería el piso a todos quienes no quieren conciliación… ante nada al que necesita de “un candidato de oposición” para poder armar su camorra... pero también a quienes de los pre-candidatos encontrasen dificultades para adaptar su imagen pública a la de un reconciliador.
Igualmente no hay absolutamente nada inconstitucional con “El Candidato a la Reconciliación” prometiendo ejercer sus poderes apoyándose plenamente en una “Junta de Reconciliación” y de convocar de inmediato elecciones nuevas si no cumple con ello, o una mayoría de la “Junta de Reconciliación así se lo exige.
Por ejemplo solo una “Junta de Reconciliación” sería capaz de aumentar los precios de la gasolina sin causar problemas.