Estoy en contra del decreto de Emergencia Económica pues has sido íntegramente preparado por quienes parten y reparten para quedarse con la mejor parte… o quizás hasta para raspar la olla.
Estoy en contra del decreto de Emergencia Económica puesto que es un decreto sin rectificaciones y que en su mayoría autoriza al gobierno país a cavar al país aún más rápido y profundo en el hueco donde lo han colocado.
Estoy en contra del decreto de Emergencia Económica puesto que los que más pagaran por sus errores son como siempre los que más necesitan que se solvente la emergencia económica… para no seguir pasando hambre.
Puntualmente estaría a favor de un gran aumento en el precio de la gasolina, siempre que le entreguen todos los bolívares resultantes directamente a los ciudadanos…¡Toma tu tomate gobierno malo!
Estoy en contra del decreto de Emergencia Económica por cuanto sugiere e incita repartir las semillas necesarias para la siembra del mañana, para tapar el hambre de hoy.
Estoy en contra de decreto de Emergencia Económica por cuanto para nada emite señales que hagan confiar en el derecho de la propiedad privada (todo lo contrario) y lo cual es indispensable para crear la suficiente confianza que permita afrentar la emergencia económica.
Estoy en contra del decreto de Emergencia Económica puesto que no dice ni pío sobre como manejar las deudas del país uno de las principales causas de la emergencia… y lo cual debería comenzar por permitirle a la Asamblea efectuar un estudio sobre el origen y uso de tal endeudamiento.
Estoy en contra del decreto de Emergencia Económica puesto que es ridículo que PDVSA, el origen del 97 por ciento de las exportaciones del país, ni siquiera se menciona.
Y estoy en contra del Decreto de Emergencia económica por cuanto de tener que estar de acuerdo con un adefesio similar, como economista y como ciudadano venezolano, se me caería la cara de vergüenza.