mayo 29, 2015

Reencontrémonos donde nunca nos hemos encontrado

Después de haber desperdiciado una oportunidad providencial, de una manera tal que pasara a ser un vergonzoso capitulo de nuestra historia… y después de derramar tantas lagrimas, y las que de seguro aún nos faltan por derramar… es totalmente inaceptable que nosotros los venezolanos nos demos por satisfechos, con el regresar y subirnos a una playita parecida a la donde nos perdimos.
He aquí tres ingredientes de un país donde nunca nos hemos encontrado:
Primero: Que cada 100 venezolanos mayores de 15 años, pueda delegar en un Delegado Ciudadano, la defensa de sus derechos ante la Asamblea Nacional.
Tales Delegados Ciudadanos serán quienes, vía internet, aprueben o nieguen todas las leyes que propongan los diputados de la Asamblea Nacional. De igual manera todo nombramiento importante, como el de los integrantes de la Corte Suprema de Justicia, el Fiscal General, los miembros de la juntas directivas del Banco Central y PDVSA, deberá contar con sus votos aprobatorios. 
Cualquier 10% de estos Delegados podrá exigir una votación entre todos ellos, con respecto a exigirle a la Fiscalía y a la Contraloría que abran averiguaciones sobre irregularidades en el sector público; y sobre la revocatoria de cualquier funcionario público. 
Todo ciudadano tendrá derecho a saber como voto, en todo, su Delegado.
Segundo: Uno que solo me toca desear por cuanto no soy quien para desarrollarlo. Como país petrolero, sufrimos “la enfermedad holandesa”… que implica que nuestra moneda (o nuestros costos en dólares si terminamos dolarizados) resulta demasiado fuerte (o altos) para competir. Por lo tanto busquemos construir la competitividad de nuestro país, en lo que no tiene precio… la seguridad personal. Cueste lo que cueste… y con medidas que a primera vista pueda hasta no gustarnos, hagamos de Venezuela, por largo rato, el país más seguro del mundo.
Tercero: Lo de siempre. Que cada venezolano reciba directamente su cuota parte de las resultas petroleras; las que incluirán lo de vender la gasolina a su precio real mundial. Si la quiere usar dándose viajecitos por el mundo, está en su derecho… pero que asuma su responsabilidad y no nos venga luego haciéndose el inocente, quejándose de un gobierno. 
Una Junta Ciudadana decidirá cuanto es el monto de resultas que puede repartirse sin poner en peligro a la capacidad extractora de Pdvsa y sin que esa empresa deba endeudarse.
Conozco de una propuesta que sugiere dedicar un 45% de las resultas petroleras a fondos de pensiones; un 50% para sufragar gastos de salud y/o educación y un 5% para proyectos dirigidos a la protección del ambiente. Eso es sin duda muchísimo mejor que lo que tenemos pero, y aun cuando lo perfecto es enemigo de lo bueno, mi problema es que lo imperfecto sigue siendo amigo de lo malo… y por eso sigo soñando y apuntando a las estrellas… 100% a los ciudadanos, para ser usado en lo que ellos quieran.
Venezolanos, reencontrémonos todos en ese país enteramente distinto.
PS. No crean que me haya olvidado de electricidad y agua. Es solo que una vez, con la Electricidad de Caracas, ya nos encontramos bastante bien servidos, pero eso no nos alcanzo.
PS. Ya oigo: “¡EDUCACION!” De acuerdo, pero necesitamos maestros que sepan que todos nos debemos a nosotros mismos y no a las ocurrencias del cacique que esté de turno. Un maestro que no protesta que se regale gasolina, dólares baratos para viajes al extranjero, y demás distorsiones… no esta educado como para educar a nadie.

Noticiero Digital
El Republicano Liberal
@PerKurowski